¿Donde está la identidad de Mazarrón? ¿Que queda de sus tradiciones?

¿Sabéis? … Me preocupa cada día más el hecho de que mi pueblo esté perdiendo por momentos su propia identidad.

No vivo en Mazarrón solo por casualidad, sino porque quiero, porque deseo y me apetece de todo corazón vivir aquí.

Me gusta mi pueblo por muchísimas y variadas cuestiones.

Para empezar, como todos sabéis, y aunque parezca un tópico, tiene uno de los mejores  microclimas de toda Europa. Su litoral, su orografía y sus paisajes son envidiables. No los hay así en todo el mediterráneo español.

Aquí se puede disfrutar plácidamente del mar, de la playa, de la montaña, del paisaje lunar de sus minas, de sus extensos campos y también, ¿por qué no? de sus viejos monumentos, de su Historia viva y de sus maravillosos atardeceres.

¡Me gusta Mazarrón!

Pero, ¡atención! esto es solo el  envoltorio, el habitat de los miles de seres humanos que, como yo, hemos elegido vivir aquí, incluso con sus deficiencias, que las hay y en ocasiones de una magnitud que quisiera ensombrecer tanta belleza.

¿Y que pasa con lo que no se ve?, ¿que pasa con el alma de Mazarrón?, ¿que pasa con los mazarroneros? Esto es lo verdaderamente preocupante, lo que a veces me quita el sueño y en ocasiones hasta me hace dudar de mi apuesta decidida por ser de aquí, por vivir aquí.

 Hecho de menos la formalidad de las tradiciones.

Me gusta, quiero, exijo,  que "Las Carrozas" sean por la mañana y que recuperen el encanto de su recorrido de siempre.

Porque ese desfile es de luz, no de oscuridad ni de tinieblas. Ese desfile es de sol, de calor, de ese que incluso en el centro de muchos días de diciembre nos regala la naturaleza a los que hemos elegido vivir aquí.

Ese desfile no necesita de lo artificial, de las "brillantes" ideas de cuatro analfabetos que nos mal gobiernan.  Ese desfile, se merece salir en la hermosa mañana de un domingo y llevar la alegría y las sanas ganas de vivir y de divertirse a los apagados rostros de gente que se merece recibir lo mejor.

Me parece un despropósito, por segundo año consecutivo, que esos "cerebros", salidos de una mal entendida democracia, me manipulen mis tradiciones.

Pero no solo son Las Carrozas. Hay muchas más cuestiones intolerables para la identidad de un Pueblo. Pasar un hermoso y brillante desfile mañanero al anonimato y disimulo de la nocturnidad es una pequeña muestra de como nos arrebatan estos incultos pero interesados regidores lo poco que nos queda de nuestra alma mazarronera.

Hago un llamamiento a los lectores de este blog para que no se queden impavidos, inconmovibles, mientras que, además de sablearnos los bolsillos, nos arrebatan nuestras costumbres, nuestras tradiciones, el alma de nuestro querido Mazarrón.


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